lunes, 24 de enero de 2011

LA BRECHA LA HACEMOS NOSOTROS



Es utópico y hasta aburrido pensar que en una población donde existe la diversidad per se no se den brechas en muchos aspectos (Cabero, 2004; Ballestero, 2002; Serrano, 2003; Santoyo, 2003), sería negar el dinamismo y la dialéctica de la sociedad. Lo inteligente es utilizar esa brecha para que todos se dirijan al mismo punto, objetivo o propósito,  para hacer de la situación desfavorable una favorable.

Hace un tiempo, en un programa por Discovery Channel, se estudiaba el vuelo migratorio de las aves (gansos). Éstas emprenden su cambio de hábitat cuando las condiciones climáticas no son prósperas para su vida y ponen en peligro su sobrevivencia. Pareciera una medición de fuerzas entre naturaleza y ser vivo, una aplicación de la Selección Natural de Darwin. 

Es curioso ver ,cómo de una manera innata, saltan al vuelo y ya en el aire se disponen en forma de “V”, un ganso puntea el vuelo y otros se van colocando en las diagonales. ¡La naturaleza es sabia!, el vuelo de cada ave proporciona una condición aerodinámica que ayuda al vuelo de la que viene atrás, de esta forma cada ave en la delantera va ayudando con su aleteo a las otras. 

En pocos momentos las distancias entre ellas, las brechas del vuelo, están en justa medida para que no estén ni muy cercanas para atropellarse o precipitarse, ni tan lejanas que no ayuden al vuelo. En pocos momentos, muchos  gansos forman una sola ave, un solo norte, una efecto sinérgico. 

Es así como se considera que se debe trabajar la brecha digital intentando disminuir la profundidad y el alcance de la brecha sacando provecho de la situación. Si bien es cierto que es un problema, más debe interesar cómo atacar las causas que la producen, que el problema como tal.

En el caso de los docentes con experticias en la aplicación de herramientas tecnológicas, estos están afectados por la brecha digital. Lo importante sería reconocer en este escollo un conjunto de soluciones que, como a las aves, sirva de ejemplo de organización, de cooperación y de obtención de resultados.

¡La brecha la hacemos nosotros! 

Referencias:
Ballestero, F. (2002) La brecha digital: el riesgo de exclusión en la sociedad de la información, Madrid : Fundación Retevisión Auna,. ISBN 84-931542-9-6

Cabero, J. (2004) Reflexiones sobre la brecha digital. En F. Soto y J. Rodriguez, Tecnología, educación y diversidad: retos y realidades en la inclusión digital, Murcia, Consejería de Educación y cultura

Ballestero, F. (2002) La brecha digital: el riesgo de la exclusión en la sociedad de la información. Madrid:Fundación Retevisión Auna. ISBN: 84-931542-9-6

Santoyo, A. y Martínez E. (2003) La brecha digital, mitos y realidades. México:Ed. Universitaria de Baja California. ISBN: 970-9051-89-X

1 comentario:

  1. Completamente de acuerdo Pedro! Simplemente, la sinergia es el elemento clave para avanzar dentro de una sociedad en la que podamos ver reflejada la capacidad de enfrentarse adecuadamente a retos permanentes y así generar cambios positivos en todos las áreas y niveles.

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